El espacio donde ejecutamos
nuestra trabajo actoral no es el mismo
espacio en el cual el personaje vive, ni tampoco será el que recrearemos para
vivir la parte. Es por ello que debemos tomar en cuenta que tipo de espacio nos
sugiere la obra, de manera de poder nosotros encontrar elementos para trabajar.
Un ejemplo sencillo, sería
estamos en una cafetería, sin buscarles más detalles, una cafetería normal. Si
como actores trabajamos desde el espacio del escenario, tenemos una mesa y unas
dos sillas. No tenemos más elementos. Este lugar es lo que ya hemos descrito en
la sección de los Aspectos Circunstanciales o Las circunstancias dadas, que corresponde
a la pregunta ¿Dónde estoy? Un dramaturgo por lo general, no dejará al azar el
espacio. Pero para ilustrar solo una capa dentro del trabajo del actor, una
cafetería implica que:
1.- Hay otras personas
2.-Puede haber música
3.-Es un espacio que no conozco, o
por lo menos no es mi casa, por tanto esto afecta nuestro comportamiento, ¿me
siento cómodo?, ¿es un lugar especial de encuentro? ¿me trae recuerdos?
4.-Ir a una cafetería implica, tener
hambre o por lo menos deseos de tomar café, un dulce, algo siempre nos provoca.
5.-Estoy allí por una razón
relacionada con mis objetivos, entonces debo definir: ¿es una cita? ¿Cite a
alguien?, ¿un evento como cumpleaños, aniversario?¿estoy de viaje? ¿entre para
ocultarme? ¿estoy espiando a alguien? .
6.-…
Siendo especifico se pueden ir
obteniendo elementos sobre los cuales trabajar, a fin de que mi personaje viva en
la escena, pues sino trabajo el espacio, mi realidad como actor entorpecerá mi
trabajo creador, sobre todo la concentración haciéndome consciente de la
falsedad que me rodea, del público, pierdo Fe y sentido de verdad. Un actor que no crea el espacio, termina
falseando la parte. En un espacio público te pueden expulsar, llamar a la
policía, por lo general, buscamos que
nadie oiga lo que hablamos, nuestros comportamientos se ven afectados por esa
conciencia de que somos vistos, evaluados por desconocidos. Si nosotros creemos que estamos en una
cafetería, el público lo sentirá igual, y reaccionará a ello. Aunque se podría
pensar que el teatro sería donde tendremos que considerar el espacio donde
estoy, pues la televisión o el cine, con más posibilidades no necesitaríamos
trabajar en ello pues lo haríamos en una cafetería real, no siempre es así, y
en caso que lo fuera, esa cafetería no representa nada hasta que le damos vida,
pues el personaje va a una cafetería, no a un set.
Ahora los espacios tienen
significados para el personaje, ¿le gusta? ¿Le disgusta? ¿Tiene algún sentido
afectivo? ¿Qué emoción genera el espacio? ¿Miedo? ¿Angustia?¿alegría? ¿Aprensión? Por ejemplo: Una cárcel, un juzgado, una
discoteca, un aula, un teatro.
Trabaje su espacio, solo con este
elemento puede ayudarse al proceso emocional y a vivir su parte.
En etapas tempranas del entrenamiento
actoral es básico el trabajo de descripción
de lugar, sea que nos guste o sea que nos desagrade. Describir un lugar sin
describir lo que sentimos solo los aspectos físicos e ir recreándolos
simultáneamente, así podemos
experimentar como nos vemos afectados por ese espacio que nos rodea. Por ello
siempre se recomienda buscar esos lugares que marcan tu memoria de impresiones
sensoriales. Hay que ser arriesgado en la preparación para así facilitar el
trabajo como actor. Un actor debe ser un
receptor de sensaciones, debe estar abierto a recibir todo lo que el mundo le
proporciona de estímulos. Susan Batson en su extraordinario libro Truth:
Personas, Needs, and Flaws in The Art of Building Actors and Creating
Characters describe como un espacio que ella denomina de decepción o fracaso
(donde hemos sido objeto de alguna humillación, hemos hecho el ridículo, nos
han hecho ver nuestros errores), se puede transformar en un elemento que ayude
a crear un estado de ánimo en nosotros análogo al que requiere la obra. El
trabajo de memoria emocional se basa en acceder a esta memoria a través de
recordar entre otros elementos, el espacio. Susan Batsón nos lleva más allá con
el ejercicio al sumergirnos dentro del espacio, mientras podemos experimentar
con otro ejercicio, como por ejemplo: el
animal.
Tomar nota de los lugares que nos
han impactado, donde hemos sido felices, donde nos han maltratado, humillado,
decepcionado, etc... Nos ayudará a poder definir donde esta nuestro personaje,
cual es el espacio que necesitamos recrear para qué podamos actuar con fe en la
verdad escénica. .
Muchos actores buscan en las
obras emociones, momentos donde destaque su trabajo, o van directo a buscar
elementos de caracterización, pero son los pequeños detalles como se empiezan a
bordar estos momentos donde brillar.
Un consejo que nos da Susan
Batson es con respecto a los casting, que por lo general son en espacios vacíos
frente a una cámara, o en un escenario vacío, espacios estériles para el
estímulo, es clave poder recrear un espacio que nos afectan como
actores dándonos elementos para crear un personaje, y ayudándonos a destacar en
una audición. Tener varios espacios trabajados para recrearlos según sea la
parte a audicionar.
La preguntas que se generan sobre
el espacio donde sucede la escena, no van a dar elementos, pero no quiere decir
que todos los vamos a trabajar al mismo tiempo, y quizás debamos elegir cuales
de esos elementos nos estimula con mayor fuerza nuestra creatividad,
imaginación y organicidad, Cuales nos funciona para sentirnos en un espacio análogo.
La importancia de considerar la
pregunta ¿Dónde estoy? es porque nos va dar la definición del espacio y la
significación para el personaje, y nos lleva a entonces definir que:
1._ debemos definir qué espacio
vamos a recrear, o/y
2._ que elementos trabajar para
hacer ese espacio tenga significado para nosotros, sea recreando un elemento
como por ejemplo: objeto personal, o/y
3._Utilizar un espacio donde hayamos vivido una situación análoga que nos conecte con una emoción.
Aunque pecando de reiterativo,es
importante sembrar la importancia del espacio donde vive el personaje, y que el
actor debe crear, puesto que:
1._ Puede de forma sencilla
resolver una escena, darle organicidad, y/o
2._ Puede ayudarle enormemente a
estimular su imaginación, y/o
3_ enfoca su atención a su
realidad escénica y no en su realidad como actor, apoya su concentración y
permite que reaccione orgánicamente.
Recuerde siempre que sus nervios,
su ego, su niño interior siempre estarán allí para llevarlo a la actuación, a
querer saltarse los procesos creativos, a enfocar su atención en el público, a
querer complacerlo buscando el aplauso, cuando comprenda el sencillo proceso de
crear su papel, con la imaginación, con sus emociones, con su intelecto, podrá
obtener el mayor aplauso, el de haber cumplido, la satisfacción de haber creado,
y podrá recibir los aplausos por una creación y no por una exhibición, o las críticas,
tomatazos o pitidos del público pues también forman parte del proceso creador,
muchas veces el niño interior y el ego quedan devastados por una crítica, pues el halago satisface el ego, es gratuito, la crítica requiere un esfuerzo, un
compromiso, alguien se vio afectado por algo que hicimos y su fuerza es tan
grande para superar la natural tendencia al aplauso complaciente, lastimero. Y
de allí saquemos nuevas fuerzas para seguir creando.
¿Es responsable el DIRECTOR de mi espacio a recrear?
No, el director no es responsable
de que usted no haya creado su espacio, no espere que alguien le vaya a ayudar
a crear, hay directores que se interesan por el trabajo actoral, pero en los
medios profesionales, el tiempo, el costo hacen que no sea posible que el
director se involucre en el proceso creativo del actor, además de que no es su
función , él debe dar los lineamientos, ajustes, direcciones en las cuales
trabajar, debe ayudar al actor dándole la información sobre el tema de la obra,
hacia dónde va el personaje, que quiere lograr, como se ubica el personaje
dentro del tema que quiere plantear.
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